arquitectura y teoría

Ante la insistencia -plenamente justificada- de algunos amigos por ver sus exámenes y/o pruebas, les sugerimos que se pasen por el Instituto de Historia, y busquen a Mary, Santiago, Sabina, Christian (a veces) y Jorge(s), que suelen estar en horarios varios.

Foto: iglesia de Atlántida, por Eladio Dieste

El próximo día 27 la Facultad de Arquitectura inaugura el Pabellón de Uruguay en la muestra internacional de la Biennale di Architettura di Venezia.
El pabellón yorugua es una rareza en toda la exposición donde nunca falta el repertorio vip, los euros, dolares y yenes. Pero el tema es que a un viejo embajador un día se le ocurrió comprar el edificio donde se guardaban las herramientas de los jardineros y convertirlo en pabellón, una cajita de zapatos con techo a dos aguas metida entre los árboles. Nada o casi nada, porque de toda América Latina sólo Venezuela y Brasil tienen locales propios y por eso lo de Uruguay es como siempre una mosca en un vaso, una piedra en el zapato, un agujero en la media, un gol en la hora, o una mano, y todas las metáforas que se les ocurran para dar cuenta del estilo molesto que nos caracteriza.
El jurado, integrado por Sejima, Izozaki y Jean Nouvel, se dará una vuelta el 27 y va a poder contemplar la hermosa alfombra de cuero de vaca bien peluda (que hizo Bertoni y dan ganas de zambullirse), unos videos de excelente factura y, además, ser obsequiado con unos catálogos y unos chorizos a la parrilla (tira de asado no creo se consiga).
En unos meses la vaca estará de vuelta en la penillanura y ya haremos el brindis en el hall como corresponde.
El proyecto está colgado de la página de facultad y pronto abriremos un blog donde mostrar el trabajo y contar novedades de Sejima, el pelado Nouvel, el Rem que va por un premio, Wim Wenders que está haciendo un documental sobre la bienal y todo el glamour al que estamos acostumbrados. Se viene el número especial de Hola Biennale con las intimidades de los famosos y el fashion metido en una chalana, no se lo pierdan.